Javier Cantera sobre ‘The Leadership Engine’

Javier Cantera

Tichy expresa claramente su concepción del liderazgo como un proceso adaptado a la nueva visión de la empresa. La consideración de la empresa como organización orientada al conocimiento y en continuo aprendizaje, demanda un nuevo perfil del líder. Dicho perfil debe basarse en tres conceptos: coaching, mentoring y valor añadido.

El líder coach, cuya misión se centra en entrenar equipos de trabajo para conseguir los objetivos con eficacia y eficiencia, se estructura con procesos de influencias a través del apoyo, desarrollo y evolución de puntos de vista propios sobre temas comunes. Entrenar se reduce a orientar, conociendo la realidad y transmitiendo con energía sus propias convicciones.

Asimismo, tenemos la imagen del líder mentor, cuya misión pretende apoyar a sus colaboradores contando experiencias. Los procesos de mentoring conllevan la utilización de la explicación y el discurso verbal coherente para transmitir los valores que trata de difundir. Ser mentor supone compartir los valores que hay que difundir y proceder continuamente a su transmisión para afianzar sus conceptos y justificar los sistemas propuestos a una compañía.

Por último, el autor hace hincapié en la visualización del líder como un centro de valor añadido, es decir, el líder debe tener su propio punto de vista para poder interpretar la realidad. Estas tres especificaciones del líder del conocimiento, con su faceta de coach (creación de líderes), de mentor (ayuda desde la experiencia) y de valor añadido (criterios autónomos y propios), llevan a Tichy a olvidar otros tres aspectos que influyen enormemente en la visión actual del líder y que, si no se contemplan, pueden desdibujar la labor del líder orientado a una organización del conocimiento.

Estos aspectos se engarzan con una visión empresarial orientada al conocimiento al indicar que un líder que aprende no puede olvidar la importancia del entorno, de las características de sus colaboradores y del factor grupal, como ejes desarrolladores del líder actual y futuro.

El entorno como variable predecible del comportamiento de un líder ha sido estudiado en multitud de textos especializados. El nivel de adaptación y de comprensión del entorno es un proceso básico de la función de un líder en la organización del conocimiento actual. Conocer se basa en adaptarse, aunque dicha adaptación no suele aprenderse sólo del pasado, como manifiesta Tichy, sino también del presente. El conocimiento del sector y los procesos básicos de benchmarking se muestran como claves para un líder actual, pues la configuración del futuro se explica desde el pasado, pero matizado con el entorno actual y la previsión futura. Por tanto, el entorno y su análisis dotan de una visión adaptativa al conocimiento eficaz del líder.

Otra variable, poco desarrollada por Tichy y cuya influencia podemos destacar en multitud de manuales, es el conocimiento de los equipos que se van a liderar. Las características personales y la experiencia de los miembros del equipo determinan una serie de valores, que las técnicas situacionales del liderazgo han destacado y que deben tenerse en cuenta en el momento de maquetar su estilo de dirección.

El líder debe enseñar, pero su labor de coach y mentor debe partir del conocimiento profundo de los colaboradores, a los cuales debemos retroalimentar en el proceso de liderazgo.

También, ha de destacar la influencia del grupo en el líder. Tichy hace una continua visión del líder como valor individual de acción específica; hemos de indicar que el factor grupal influye mucho en el líder. Un líder muy autónomo no puede explicarse sin poder influir unos valores de equipo y energizar no sólo al individuo, sino también al trabajo en equipo.

A modo de conclusión, debemos indicar que Tichy nos dota de una concepción muy adecuada al momento actual del liderazgo, pero debemos pensar que un líder entrena, asesora y opina en un contexto, con unos determinados recursos humanos y en un grupo de opinión.

De la grata lectura del libro, concluimos, con Braudillard, que la realidad es compleja y solamente la hacemos sencilla para comprenderla. El intento de simplificación de Tichy rebosa sugerencias y transmite energía para desarrollar un liderazgo hacia el conocimiento.

 

Javier Cantera

Presidente del Grupo BLC

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