Alfredo Enrione sobre ‘Liderar para el bien común’
Alfredo Enrione
Profesor de ESE Business School de la Universidad de los Andes (Chile)
Nuestro actual sistema de organización social, basado en el capitalismo y el libre mercado, afronta tres dilemas urgentes. Son dilemas, y no meros desafíos, porque no tienen una respuesta simple y requieren equilibrar aspectos aparentemente contradictorios entre sí.
El primer dilema surge del propio éxito del modelo. Tras la caída de la Unión Soviética, el libre mercado ha revelado grandes oportunidades y ha congregado recursos y talentos a escala global para crear una riqueza sin precedentes en la historia. Millones de personas han salido de la extrema pobreza en China, América Latina y otras latitudes. Sin embargo, aquellos más afortunados, educados y capaces han sido especialmente beneficiados de este crecimiento. Para buena parte de la población, las mejoras han sido modestas. ¿Cómo alcanzar entonces un modelo de desarrollo que genere riqueza pero que funcione para todos, no solo para los más privilegiados?
Un segundo dilema surge de la conmoción social causada por malas prácticas empresariales. Los casos como Enron a finales de los años noventa y la crisis financiera global desatada una década después generaron la percepción pública de que en muchas empresas el fin justificaba los medios. Movimientos como “Occupy Wall Street” han dejado de manifiesto que los propios capitalistas podrían ser la mayor amenaza para el capitalismo. ¿Cómo es posible construir culturas empresariales sostenibles, basadas en la integridad, que sean dignas merecedoras de la confianza de sus empleados, sus clientes y la sociedad en general?
El tercer dilema emerge de la esencia del quehacer empresarial. Las corporaciones atraen enormes cantidades de recursos financieros, talento, energía y creatividad para ofrecer productos innovadores al servicio de las necesidades de sus clientes. Sin embargo, inversores y clientes satisfechos no garantizan la sostenibilidad de las empresas a largo plazo. ¿Cómo es posible conservar la capacidad empresarial sin perder de vista el bien común y la necesidad de considerar objetivos compartidos con la comunidad?
Luis Huete y Javier García intentan responder a estos dilemas de una forma original y despegándose de las posturas dominantes. No se trata de nuevos modelos de negocio o culturas organizacionales, ni de nuevas estrategias de responsabilidad social, sostenibilidad o valor compartido.
Hoy, más que nunca, la empresa privada cuenta con los recursos, el talento y la agilidad necesarios para convertirse en la mayor fuerza de transformación y mejora social de la historia. Huete y García nos recuerdan que la clave de esta transformación está en nosotros mismos.
El libro
Lo que es bueno para la sociedad y las personas es bueno para los negocios
Luis Huete y Javier García
La complejidad a la que hoy se enfrentan las empresas no tiene precedentes en la historia y no va a hacer más que agudizarse. Hoy más que nunca va a hacer falta un liderazgo centrado en el bien [...]