Descripción
Cualquier organización ambiciona evolucionar y crecer de forma orgánica, pero son pocas las que disponen de un plan y unos procesos adecuados para conseguirlo de forma sostenible. El emprendimiento corporativo o intraemprendimiento combina el ecosistema para fomentar y cultivar el espíritu emprendedor con estrategias, herramientas y procesos que permiten identificar, definir, desarrollar, capturar y capitalizar oportunidades de negocio de manera ordenada. Es una disciplina que se aprende, se practica, se mide y se gestiona.
Claves
- Métodos de generación de ideas.
- Los cuatro pasos de la captación y el filtrado.
- La importancia del cuadro de mando.
Cualquier organización ambiciona evolucionar y crecer de forma orgánica, pero son pocas las que disponen de un plan y unos procesos adecuados para conseguirlo de forma sostenible. El emprendimiento corporativo o intraemprendimiento combina el ecosistema para fomentar y cultivar el espíritu emprendedor con estrategias, herramientas y procesos que permiten identificar, definir, desarrollar, capturar y capitalizar oportunidades de negocio de manera ordenada. Es una disciplina que se aprende, se practica, se mide y se gestiona.
Algunas personas pueden pensar que es una moda pasajera, pero la realidad nos muestra que no es así. Es más, la globalización, la alta competitividad, un consumidor cada vez más exigente, la democratización del conocimiento y la rápida transformación tecnológica son algunos de los factores que confirman la necesidad de innovar. La innovación se ha convertido en una necesidad para sobrevivir en un entorno tan cambiante como es aquel en el que vivimos.
Por naturaleza, el emprendimiento corporativo adopta los conceptos de innovación abierta y colaboración con startups. Lo cierto es que estas ya no se ven como “el enemigo”: las empresas se han dado cuenta de las posibilidades que ofrece la colaboración entre ambas para obtener mejores resultados a través del corporate venturing. La combinación de la solidez y recursos de la gran empresa con las características de la emergente pueden ofrecer la fórmula perfecta del éxito.
A diferencia del puro emprendimiento, el intraemprendimiento ofrece un medio propicio para impulsar un proyecto de emprendimiento sin necesidad de jugárselo todo y lanzarse a una aventura incierta que en ocasiones acaba en fracaso. Es una apuesta de riesgo medio, como un salto con red, gracias al apoyo corporativo adecuado. Lamentablemente, en la gran mayoría de las grandes compañías, el carácter de los emprendedores no es compatible con el ambiente estable, burócrata y lento que reina en ellas.
Tribuna
Autores
Tomás Soler
Socio fundador de Global Vision Consulting y de Atiens, empresa especializada en márketing digital, web y e-commerce.
Joan Riera
Socio fundador de Active Development, profesor de ESADE, presidente del Club de Innovación de ESADE Alumni y cofundador de la red de inversores ESADE BAN.
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