Descripción
Pasión es una palabra que solemos utilizar para hablar de nuestra vida amorosa, pero rara vez para hablar de nuestra vida profesional. Cuando sientes pasión por tu trabajo, tu lugar de trabajo no es una prisión destinada a encerrarte hasta que te hayas ganado tu libertad ni tu trabajo es un medio para alcanzar un fin, como, por ejemplo, la jubilación. Cuando sientes pasión por tu trabajo, no estableces unos límites entre la jornada laboral y el tiempo libre, ya que el propio trabajo es tiempo libre. Tal como veremos a continuación, semejante pasión por el trabajo está al alcance de todos sin excepción.
Claves
- Cinco pasos para facilitar la búsqueda de la pasión.
- Excusas más frecuentes para no innovar.
- La importancia de la marca personal.
Pasión es una palabra que solemos utilizar para hablar de nuestra vida amorosa, pero rara vez para hablar de nuestra vida profesional. Cuando sientes pasión por tu trabajo, tu lugar de trabajo no es una prisión destinada a encerrarte hasta que te hayas ganado tu libertad ni tu trabajo es un medio para alcanzar un fin, como, por ejemplo, la jubilación. Cuando sientes pasión por tu trabajo, no estableces unos límites entre la jornada laboral y el tiempo libre, ya que el propio trabajo es tiempo libre. Tal como veremos a continuación, semejante pasión por el trabajo está al alcance de todos sin excepción.
Una pasión es algo más que un interés. Los intereses van y vienen… y a veces se esfuman. Cuando una persona tiene una idea que suscita una pasión, no puede dejar de pensar en ella. Uno quiere comprenderla profundamente: de forma natural se ven vacíos que deben llenarse, errores que han de corregirse e innovaciones que piden a gritos su creación. La pasión conlleva la inclinación inherente a actuar. La pasión también evoluciona a medida que adquirimos experiencia, de manera que puede ampliarse o hacerse más profunda. Por supuesto, uno puede tener más de una pasión o descubrir una nueva.
A veces el talento se encuentra en un adolescente desaliñado de diecisiete años con ideas ingeniosas, vitalidad y la esperanza de acometer maravillosas aventuras. Por desgracia, se hace adulto y es al mundo de los adultos adonde el talento va a morir. Muchos adultos acabamos atrapados en nuestra cultura de abejas obreras. Las normas son claras: haz lo que se te dice y se te pagará, trabaja para vivir los fines de semana y temer al lunes, espera con ansia tu jubilación, etc.
Toda persona debe aspirar a una carrera profesional fantástica. Una profesión fantástica es la que ofrece un trabajo satisfactorio que deja huella en el mundo, un salario adecuado y fiable y, por último, libertad personal. La obtención de una carrera profesional fantástica no tiene nada que ver con la suerte y todo que ver con un enfoque analítico, una acción metódica y una determinación.
Tribuna
Amber Wigmore Álvarez
PhD, Chief Innovation Officer, Highered EFMD Shared Career Services.
Autores
Larry Smith
Profesor de Economía en la Universidad de Waterloo en Ontario (Canadá) y presidente de Essential Economics Corporation.